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domingo, 16 de marzo de 2014

Jardín Histórico. Parque La Quinta de Los Molinos


El condado de Torres Arias es un título nobiliario español creado el 25 de mayo de 1761 por Carlos III a favor de María Francisca Colón de Larreátegui y Ximénez de Embún.
Mariano Colón de Larreategui y Ximenez de Embun XI duque de Veragua, de la Vega, marqués de la Jamaica, Almirante de las Indias, con sus tierras y sus coloniasSu hermana María Francisca Colón de Larreategui y Jimenez de Embún fué creada I marquesa de Torrearias por Carlos III en 1761. Ce casó con Pedro Golfin de Carvajal descendiente de una de las familias mas importantes de Careces en cuyo palacio se alojo Isabel La Católica en diversas ocasiones 

La Grandeza de España se le atorgó el 26 de junio de 1910 por el rey Alfonso XIII a favor de Ildefonso Pérez de Guzmán el Bueno y Gordón, VI conde de Torre Arias.


La Quinta de Torre Arias fue antes del conde de Villamor, del conde de Aguilar, hasta llegar al marqués de Bedmar, y finalmente de los Torre Arias. 

A la espera de que sea abierta, diremos que 

El III conde de Villamor, Señor de Talamanca, Caballero de Santiago en 1622 tiene una hermana llamada María de Velasco Alvarado casada con Juan Ramírez de Arellano y Manrique de Lara, VIII conde de Aguilar de Inestrillas, Grande de España. Siendo muchas las deudas contraídas por el Condado de Aguilar se ven obligados a vender su Casa de Campo de Canillejas y la compra
en 1741 Francisca Javiera Bibiana Pérez de Guzmán el Bueno y Silva Mendoza, hija de los duques de Medina Sidonia, nieta de los del Infantado y Pastrana y viuda del VII  de Osuna,  José María Téllez-Girón y Benavides, Marqués de Frómista, Conde de Caracena, Pinto y Ureña. La Finca es vendida por la duquesa viuda de Osuna. Su nuera hace el Parque del Capricho.

Después de pasar por diversos dueños vuelva a los Medina Sidonia por la compra que hacen  Pedro Álvarez de Toledo Palafox, XVII duque de Medina Sidonia, y su mujer Joaquina de Silva Téllez-Girón, hija de los marqueses de Santa Cruz. La Quinta seguía siendo de las más antiguas de los alrededores, pero de menor belleza que la de sus primos los duques de Osuna, El Capricho de la Alameda. Su hijo el XVIII Medina Sidonia vende la propiedad a Manuel de Acuña y Dewitte, X marqués de Bedmar.


El VI conde de Torre Arias vende esta propiedad de la Quinta de los Molinos. Pasa a ser dueño de la Quinta inmediata a la que fue suya y que es la llamada Quinta de  Canillejas o de la Marquesa de Torre Arias por su ultima titular que la deja a su muerte al Ayuntamiento. 

El VI conde de Torre Arias es dueño de la Quinta de Canillejas por compra suya o tal vez por su mujer hija de los condes de La Torrecilla que a fines del siglo XIX la compran al morir la marquesa viuda de Bedmar. 

Narciso de Salabert y Pinedo, VIII marqués de Torrecilla, y  María Josefa de Arteaga y Silva, hermana del XVI duque del Infantado,  compran a la marquesa viuda de Bedmar la Quinta de Canillejas, son los padres de María de los Dolores de Salabert y Arteaga, VIII marquesa de la Torre de Esteban Hembrán y dueña por sus padres de la Quinta, que casa con el VI conde de Torre Arias. Padres del VII Conde. 

La abuela de la última marquesa de Bedmar dueña de la Quinta de Canillejas es hermana de María Josefa de Arteaga y Silva y del XVI duque del Infantado.


Alfonso Pérez de Guzmán el Bueno y Salabert (1890-1978.) VII conde de Torre Arias, X marqués de Santa Marta. Casa en primeras nupcias con Ana Juliana Seebacher y Muller. 

Padres de 


Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno y  Seebacher, VIII condesa de Torre


Durante muchos años Tatiana vivió en la Quinta, 

aunque no en el palacete principal, 

sino en una casa más pequeña construida en el siglo XIX. 

Sin embargo, tras la muerte de su marido, en 2003, 

la condesa trasladó su residencia a una casa señorial 

en el Paseo de Martínez Campos.


Otras quintas fueron Fuente del Berro, Vista Alegre, Monclova, estando por encima de todas El Capricho, que aunque tardía, fue la más impresionante.



La finca de Canillejas no era solo recreativa, era una granja en las afueras de la ciudad donde tenían animales y cultivos y que surtía, entre otras cosas de leche, a la vivienda de la familia, en la calle Martínez Campos esquina a Fernández de la Hoz. 

También lugar de encuentro de los jóvenes de la nobleza que se dedicaban a sus fiestas y al nuevo juego del tenis.









Pedro-Matías Golfín de Carvajal y Ágreda casa con María Francisca Colón de Larreátegui y Jiménez de Embún, I condesa de Torre-Arias. Padres de Cayetano-Pedro Golfín de Carvajal y Colón de Larreátegui, II  conde de Torre Arias. Casa con   María de las Casas y Mendoza-Rivera